‘Diamantes de sol’: El proyecto de Leonardo DiCaprio que revivirá un pueblo de la España vacía
La ilusión que ha generado en Trujillo la fábrica de diamantes sintéticos, de la que Leonardo DiCaprio es uno de los principales accionistas y asesores, se puede medir en una sola imagen.
Los habitantes de este pueblo de la España vaciada situado en Extremadura, en el oeste de España, pasean por la explanada de la futura fábrica de la norteamericana Diamond Foundry solo para ver cómo va la construcción y admirar el trabajo de los maquinistas. A pesar de que no estará lista hasta 2024.
Todos tenían miedo de que la construcción de una fábrica de diamantes sintéticos realizados de forma sostenible no saliese adelante.
“Esta historia empieza con un poquito de escepticismo. ¿Cuántas cosas nos han ido prometiendo a lo largo de los años que al final no se han cumplido?”, cuenta a Euronews José Antonio Redondo, el alcalde del pequeño pueblo.
Por eso, según Redondo, la gente va a ver los trabajos de construcción, porque no se creen que esto le pueda estar sucediendo a Trujillo.
“Ha creado muchísima ilusión y le dará un respiro al pueblo”, asegura el alcalde.
A pesar de ser conocido como “el pueblo más bonito de la provincia”, cada vez se ven más cárteles de “se alquila” y locales vacíos.
En la década de los 50, este municipio llegó a superar los 14 000 habitantes. Sin embargo, con los años ha ido perdiendo población, y ahora no llega a los 9 000, según el Instituto Nacional de Estadística.
“Es imposible que se mantenga la población en los territorios despoblados solo con la hostelería y el sector agrícola”, afirma Redondo.
La creación de “diamantes de sol”
El sol extremeño y las óptimas condiciones orográficas de la zona consiguieron convencer a la empresa norteamericana.
La idea es elaborar diamantes para diversos usos. Por un lado el diamante destinado a la joyería y, por el otro, el destinado a la actividad industrial.
Estas piedras se pueden utilizar para producir chips de cristal de diamante cuyas propiedades como semiconductor se utilizan para fabricar teléfonos móviles y baterías de coches.
Su producción es 100% hidroeléctrica. Mientras un yacimiento de diamantes necesita miles de años para poder extraerlos, a través de la energía solar se pueden fabricar diamantes sintéticos en una semana.
Durante las negociaciones se barajaban otras opciones como China o los emiratos árabes.
Se eligió el terreno español por dos razones: por un lado, el precio razonable de la energía renovable y, por el otro, la seguridad de que es un mercado estable.
“La gente está contentísima”
Su creación generará hasta 1 000 puestos de trabajo cuando esté funcionando a plena capacidad, lo que para un pueblo de 9 000 habitantes es un balón de oxígeno.
La tasa de paro se encuentra “un poquito por encima de la media” y supera el 10%, en palabras del alcalde.
“A todos nos parece estupendo que se construya la fábrica. Cada vez hay menos gente en Trujillo y las opciones para la gente jóven es o bien la restauración o la construcción, con lo cual, se tienen que ir del pueblo”, cuenta a Euronews Isidro, un habitante de Trujillo propietario de una tienda de embutidos.
Para María Esther, dueña de una tienda de ropa en el municipio, las perspectivas son buenas. “La gente está contentísima, a la espera de que la fábrica esté lista y ver los acontecimientos”, asegura.
La inversión inicial es de 245 millones de euros, de los cuales 120 millones han sido adjudicados a Diamond Foundry por el Fondo de Apoyo a la Inversión Industrial Productiva, parte del Ministerio de Industria español, para incentivar proyectos regionales.
Diamond Foundry ha asegurado que su inversión total ascenderá hasta los 670 millones.
Luchar contra la despoblación
Las negociaciones para conseguir que la fábrica se construyese en Trujillo fueron duras.
En total han pasado dos años desde la primera toma de contacto entre las autoridades de la región y la empresa norteamericana.
“Tuvimos que saltar barreras muy difíciles, han sido negociaciones agotadoras. Siempre hemos sentido cerca la espada de Damocles, teníamos miedo de que en cualquier momento podría venirse abajo el proyecto.”, afirma el alcalde de Trujillo.
Tras conseguir lo que se proponían, el pueblo mira con esperanza la actividad económica que generará a su alrededor.
“Es una gran oportunidad. Todas las empresas satélites que se generarán en torno a la fábrica podrán dar trabajo a los graduados universitarios. Ya hemos hablado con la Universidad de Cáceres (la más cercana) para que los que terminen los estudios puedan venir aquí”, señala el alcalde.
La idea de que Leonardo DiCaprio está detrás del proyecto también genera interés turístico. Por el pueblo se preguntan si el actor irá a visitar la fábrica en algún momento.
DiCaprio, comprometido con el medio ambiente, se involucró en el proyecto tras grabar la película Diamantes de Sangre, en la que uno de los protagonistas fue arrebatado de su familia y forzado a trabajar en los campos de diamantes.
Ambientada en 1999, durante la guerra civil de Sierra Leona, la película muestra un país dividido por la guerra. Las fuerzas rebeldes utilizan los diamantes para financiar su esfuerzo bélico.
Desde que DiCaprio trabajó en la película, el actor se siente orgulloso de invertir en Diamond Foundry y cultivar diamantes de forma sostenible.
Fte: euronews.com
Cristian Riquelme D.